El sufrimiento interno es una barrera en el camino hacia la felicidad. Nadie que arrastre y cargue con dolores, heridas y traumas de su pasado puede aspirar a lograr fácilmente el tan ansiado bienestar. Si te encuentras en esta situación, es imperante que te pongas en acción para sanar, y el primer paso para despojarte de aquello que te daña es la aceptación de lo que fue y de lo que es, y por supuesto aceptarte tal y como eres.
¿Cual es el camino para superar el sufrimiento interno?
De acuerdo al psicólogo y psiquiatra suizo Carl Jung, es imposible pretender cambiar algo si antes no lo aceptamos. ¿Cómo dejar de lado el egoísmo si no nos reconocemos como egoístas? ¿Cómo renunciar a controlar al otro si no nos percibimos como controladores? ¿Cómo sanar si no aceptamos que estamos sufriendo?
Cuando experimentamos un dolor profundo o sus consecuencias, es conveniente tomar el control de nuestro ser. La solución para liberarnos de las ataduras al sufrimiento reside en aceptar aquello en sentimos.
¿De qué hablamos cuando hablamos de aceptación?
Una de las razones que nos llevan a rechazar la “aceptación'' es que la confundimos con la resignación, o con la negligencia o la inacción. “Si acepto que soy una persona envidiosa, mi realidad pasará a ser esa.” Este pensamiento es mucho más común de lo que creemos. Afortunadamente, la aceptación no implica empezar a ser de la forma en la que queríamos evitar ser, sino que es una mirada sincera hacia lo que es y puedo transformar.
La aceptación es el eslabón primordial entre lo que soy y aquello en lo que me quiero convertir.
Veámoslo a través de la siguiente analogía: si mi meta es llegar a Madrid y actualmente me encuentro en el centro de Barcelona, de nada sirve intentar autoconvencerme de que estoy en la cima del Everest, ya que las acciones que necesitaré en cada una de tales circunstancias son muy diferentes una de la otra.
Por lo tanto, si quiero ser una persona abierta, honesta, carismática y libre de prejuicios, tendré que aceptar que en algunos, o en todos, los aspectos soy todo lo contrario en este momento. Eso me permitirá mirarme sin filtros y emprender el camino hacia lo que deseo desde las circunstancias que definen mi presente.
Pasos a seguir para consolidar la aceptación de mí mismo
Como ya habrás podido dilucidar, la aceptación es el amor en su más pura expresión. Al aceptarte, te amas por lo que quieres llegar a ser, a pesar de lo que hoy eres. Y en ello está la clave para decidir cambiar en vez de permanecer atrapado en una personalidad que no está alineada con tus objetivos.
¿Cómo se logra la tan necesaria aceptación?
A través de los siguientes pasos:
Identificación del problema
Hay algo en nuestro interior que no queremos que se quede allí. Por ende, el primer paso es identificarlo y comenzar a llamarlo por su nombre. Palabras tales como envidia, egoísmo, pereza, deshonestidad, rencor no suelen estar en armonía con lo que queremos ser y proyectar. Sin embargo, sólo reconociéndolas y aceptándolas como parte de lo que somos, pero que queremos cambiar, las podremos transformar en lo que deseamos para nuestro universo interior.
Tomar acción
Si hemos tomado la decisión de cambiar, sentarnos a esperar que el milagro ocurra es una utopía. Los cambios ocurren no solo porque así lo queramos, sino porque ponemos en marcha los mecanismos necesarios para la transformación. Y el cambio verdadero, ese que perdura en el tiempo y nos impide recaer en viejos vicios, es aquel que se produce en el centro mismo de nuestras convicciones y acciones personales. De modo que si quieres dejar de ser egoísta, debes entender y practicar la generosidad como un acto gratificante.
Pedir ayuda
Una transformación no es algo sencillo. En consecuencia, muchas veces es necesario pedir ayuda para lograrlo. Este es el momento perfecto para darte cuenta de si te encuentras rodeado de personas que son afines a la meta que deseas lograr.
¿Cómo superar el sufrimiento interno?
Por lo tanto, tal vez es un momento de despedidas, porque continuar caminando codo a codo con quienes se oponen a esta nueva versión en la que te quieres convertir, dificulta tu proceso y, en el peor de los casos, puede llevarte a resignarte. Si esto ocurre, terminarás por decidir que cambiar para sanar no vale la pena. Y esto sería un error.
A su vez, también es un momento ideal para recurrir a la ayuda profesional. En los casos en los que hay mucho para sanar, ni la voluntad propia ni el apoyo de los seres queridos suelen ser suficientes. Es aconsejable que un profesional te ayude y acompañe decidir el camino y seguirlo.
Sanar es nacer dos veces
Primera consulta online gratuita terapia gestalt presencial, y online en Barcelona y Madrid
Te ofrecemos una primera visita gratuita, sin compromiso, para conocernos y que empezar sea más fácil. Hablaremos de lo que te está pasando y valoraremos cómo podemos ayudarte, para que tú decidas.
Esta primera visita tiene una duración entre 20-30 minutos, sólo tienes que contactar con nosotros para pedir día y hora. Te atenderá el profesional que más se adapte a tus necesidades y horario y podrá orientarte desde ese primer momento en lo que necesites.
Modalidad: Online y/o semipresencial
Forma de pago: El pago se realiza según acuerdo con el profesional que te atienda.
Consulta tarifas reducidas: para personas con vulnerabilidad económica.